¿Qué falla en pleno siglo XXI?
No tendríamos que estar hablando de igualdad a estas alturas, pero estamos todavía muy lejos de la plena equidad entre hombres y mujeres. Lo evidencian los datos. Datos de ocupación laboral, brecha salarial y diversas formas de explotación que sufre la mujer en todo el mundo. La discriminación que sufren algunas de ellas está presente desde su nacimiento y condiciona sus expectativas y su camino a lo largo de sus vidas.
A día de hoy vivimos un espejismo de igualdad. Existe la igualdad formal (la que contempla la ley) y la igualdad real. La primera es necesaria para obtener la segunda, pero no la garantiza. La igualdad de género no solo es un derecho fundamental. Es, además, esencial para el bienestar de las sociedades y las economías. La búsqueda de la igualdad de género debe ser una prioridad para lograr un crecimiento sostenible e inclusivo en beneficio de todos los ciudadanos.
No hay razón para que las mujeres sigan detrás de los hombres en la esfera social, económica o incluso política. Sin embargo, el salario medio anual de una mujer es un 22% más bajo que el de un hombre. Entre 2009 y 2015, la tasa de desempleo ha afectado a toda la población, pero no por igual. La cifra de las mujeres ha crecido 5,42 puntos, mientras que la de hombres sólo ha aumentado 3,13 puntos.
En uno de sus últimos informes sobre igualdad de género, la OCDE preguntó a 37 países, entre ellos España, cuáles eran los retos más urgentes a los que se enfrentaban en relación con la desigualdad de género. La violencia contra la mujer ocupó el primer lugar. En el segundo puesto situaron que ellas cobraran menos que ellos y, en tercer lugar, la desigualdad en el reparto de las tareas domésticas.
Es por eso por lo que debemos alzar la voz para gritar que se han de tener las mismas oportunidades reales en la sociedad, independientemente de si somos niños o niñas, mujeres u hombres. Es importante que todos seamos conscientes de estas situaciones injustas, las denunciemos y luchemos contra ellas para cambiarlas cuando esté en nuestras manos. Te invitamos a unirte a nuestra causa y firmar nuestro manifiesto que ya han suscrito grandes mujeres y hombres, como Margarita Álvarez, directora de Comunicación y Márketing de Adecco e impulsora del Observatorio Innovación en el empleo; la filósofa y defensora de los derechos de las mujeres Amelia Valcárcel; la periodista Montse Domínguez; el escritor y hombre feminista Isaías Lafuente; o la ajedrecista Anna Muzychuk, encargada de reivindicar la igualdad en el deporte. Diferentes personalidades que desde su campo de batalla luchan por los derechos de las mujeres. Todavía queda mucho camino por recorrer, pero la batalla por la igualdad no debe cesar, porque la desigualdad es cosa de TOD@S.
Firma nuestro Manifiesto por la Igualdad
